El visitadorE. Goubaud, 1897 |
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Common terms and phrases
abrió acababa aguardar Alguacil alma alquimista amigo anciano Andrés Molinos añadió Araque artesano Bonifacio caballero caballo cabeza calle capitán Peraza carta ciudad cofrecillo Conde corazón Correa creo cuya daba debía decía mi abuela dejó diablo diciendo dijo el barbero dijo el Visitador dirigió Dña Doctor Drake encerrado encontró escribano escuchar esposa estaba estoy exclamó Fernando fisonomía Francisco Jirón Manuel Francisco Molinos gabinete Genoveva gentes Gomera Grantzius grave gritó Guatemala hablar habría hermano herrería herrero hijo hizo homúnculus hora hubo huésped Ibarra Jerónimo Jocotenango joven Judas Juez de residencia lego levantó llamado llave llegado Loaiza luego Luis Melián maestro Basilio Molinos mano Margarita Jirón Merced momento monstruo negro mosquetes mujer mundo noche ocupaba Oidor ojos oyó Pablo padre Padrenuestros palabras Paracelso parece paso pobre poco podía preguntó Presidente Provincial pudo puerta puso querido replicó saber salió secreto Sir Francis Drake Sololá sótano tenía tomó veía vió volvió Vuesa
Popular passages
Page 52 - ... cubierta con ramas, fueron subiendo al Rey, hasta colocarle en la casilla construída en la cima. Los guerreros de Sinacam tomaron posiciones en el cerro, esperando a sus adversarios, los descendientes de los tlaxcaltecas, que desembocaron por la calle que va a Ciudad Vieja. Estos venían vestidos a la usanza española, con armaduras, espadas, broqueles y lanzas. Pronto comenzó el combate. Los supuestos soldados de Portocarrero formaron en torno del volcán una figura triangular, como la que...
Page 380 - ¡Maldito el hombre que del hombre fía! Sólo fiar en Dios es lo seguro: Descargar la conciencia cada día Es contra todo mal un fuerte muro. Dios los trabajos por la culpa envía; Forzoso es el morir, mas trance duro; Hombres, vivid como si siempre fuera Cada hora del tiempo la postrera. Sólo el amigo es Dios, que es sobre todo; Que la amistad del mundo sólo es nombre.
Page 91 - Inés, amantes, es quien tuvo en mí tal poder, que me hizo aborrecer todo lo que no era Inés : trájome un año sin seso, hasta que en una ocasión me dió a merendar jamón y berenjenas con queso.
Page 100 - Si de esta manera crece; señora, tu disfavor, y al mismo punto mi honor se levanta y desvanece; y si por amar así no merezco galardón, bien pueden cantar por mí , Kyrie eleisón.
Page 359 - A tus desdenes, ingrata, Tan usado está mi pecho, Que de ellos ya se sustenta Como el áspid del veneno. En tu amor pensé anegarme, Pensé abrasarme en tu fuego; Mas ya no temo a tus brasas, Tampoco a tus hielos temo.
Page vii - ... cortos para no fastidiar nunca; el lenguaje castigado y elegante, sin dejar de ser natural. En toda la obra se manifiesta un exacto conocimiento de las localidades en que pasan las escenas que se refieren, y están relacionadas éstas con tal viveza, que podríamos reconstruir con la imaginación...
Page 207 - Escúchame, reina mía, Así Dios le dé salud ; Le cantaré una letrilla, En templando mi laúd. Quiero, señora, que entiendas Que en mi tierna juventud Me doy, no a vicios, como otros, Sino a seguir la virtud". Doña Margarita, al escuchar aquel canto, corrió las cortinas de su ventana y desapareció. El herrero sentía que la sangre hervía en sus venas y se esforzaba por reportarse, hasta ver en qué paraba todo aquello. El destemplado cantor continuó, variando letra y música, entonando los...
Page xxii - Jocotenango, á quien tocaba el papel de Rey Sinacam, no quiso en una ocasión cederlo al gobernador de San Andrés Itzapa, no obstante la oferta de quinientos pesos. ¡ Tanto era el honor que aquéllos creían reportar figurando en dicha farsa ! Como escritor de costumbres logró Salomé Jil captarse la simpatía...
Page 124 - Candelaria y situándose en Jocotenango desde las cuatro y media de la mañana. — ¿Y cómo es un Visitador, nanita? preguntaba una moza a su anciana abuela, que llegaba casi arrastrándose, habiendo tenido que correr desde cerca del Calvario, donde vivía. — Es un señor muy grande, contestó la buena mujer. — ¿Será más grande, replicó sencillamente la muchacha, que el San Cristóbal que está en la Compañía? — No es de cuerpo, boba, dijo la abuela, sino de auciones. ¡Con decirte...
Page 378 - Vi venir en romería Una nube muy cargada, Y un broquel con una espada En figura de hermitaño, Caballero en un escaño, Con una ropa nesgada Toda sana y muy rasgada.