Francisco

Front Cover
N. Ponce de Leon, 1880 - Cuban fiction - 156 pages
 

Other editions - View all

Common terms and phrases

Popular passages

Page 70 - sobrevenido la noche, y aunque de luna, todos saben que las faenas se ejecutan regularmente donde son fáciles. Cerca de las diez paró el trabajo; una campanada tocó la queda, y •los negros, que de antemano la aguardaban impacientes, recogieron pronto los haces de yerba, y se pusieron por el camino
Page 60 - en las horas de amargura buscar aquella arboleda tan acorde con el estado de su alma, y que tanto bálsamo derramaba en sus heridas ; pero sea que las enfermedades mengüen el ánimo, que las palabras del mayoral le lastimasen .profundamente, que rebosara ya la copa de adelfa, de hiél que
Page 47 - meter combustible en las fornallas de las calderas en que se elabora el azúcar; los negros prácticos y experimentados en ese ejercicio no lo extrañan casi nada; habitúanse al calor del fuego, adquieren una destreza extraordinaria en alimentarlo, resguardando al mismo tiempo su cuerpo, y entienden perfectamente el idioma de
Page 154 - acabado por arrebatárselo todo. Sin padre, ni madre, ni hermanos, ni otro pariente alguno; sin amigos; en Cuba, tierra de blancos; esclavo, hijo de Africa y negro; con una imaginacion ardiente como el sol que lo
Page 32 - de estos negros llega al alma, habla al corazon; principalmente aquellas canciones que entonan en memoria de los difuntos, con el cadáver en medio sobre una tarima,. y ellos en torno sollozando. En el corte de
Page 31 - esos cantares, y no saltársele á uno las lágrimas. Pero hay tonadas que no varían, porque fueron compuestas allá en África, y vinieron con los negros de
Page 73 - les arrebata el alma; en oyéndolo, paréceles que están en el cielo. Sólo Francisco no se mezclaba en tales regocijos; sentado sobre un trozo de madera junto
Page 31 - escesivos; en el primer caso más bien se grita que se canta; en el segundo, las modulaciones de la voz son tristes y lúgubres, ni
Page 47 - para la mano, mete para adentro, que se duerme, he aqui algunas de las frases que se usan comunmente por los maestros de azúcar. El calórico que despiden las fornallas es intenso, y

Bibliographic information